AT&T finalmente desistió de la idea de adquirir a T-Mobile USA en un acuerdo que se habí­a anunciado para marzo de este de año y retiró su oferta de compra asumiendo el costo de 4 mil millones de dólares como parte de lo acordado si la compra no se llevaba a cabo.

La decisión de retirar su oferta es tomada luego de que AT&T explorara las opciones disponibles para adquirir a T-Mobile y encontrar que realmente eran bien escasas.

La oferta de adquisición por parte de AT&T enfrentó una dura oposición por parte de Sprint, el Departamento de Justicia de los Estados Unidos y, aunque de manera no oficial, de la FCC (nunca emitieron un fallo oficial en cuanto a dicha compra).

AT&T indicó en su comunicado que a pesar de que su oferta de adquisición enfrentaba una fuerte oposición, la realidad es que la industria inalámbrica enfrenta una necesidad por espectro que debe ser atendida inmediatamente y que la compra de T-Mobile hubiese podido solucionar dicha necesidad.

“AT&T continuará siendo agresivo en liderar la revolución del Internet móvil” indicó Randall Stephenson, chairman y CEO de AT&T. “En los pasados 4 años hemos invertido más en nuestra red que ninguna otra compañí­a en Estados Unidos. Como resultado, hoy en dí­a proveemos las mejores velocidades de ancho de banda, conexiones a “smartphones”, “tablets”, y otros productos que continúan saliendo, y estamos muy bien encaminados con el despliegue de LTE 4G”.

Según el comunicado AT&T pide al gobierno que se atienda el problema de la falta de espectro que sabemos que a medida que la industria de las comunicaciones inalámbricas crece, dicha necesidad se convierte en una preocupación.

Una de las cosas que sugieren es que se apruebe pronto la adquisición de espectro de Qualcomm por parte de AT&T que aún espera por la aprobación de la FCC.